Ana María Taigi
Ana María Taigi, patrona de las madres de familia
En alguna ocasión cuando Ana María Taigi pasaba cerca de la casa de una persona enferma, le dice la dueña: ¡ Entre, entre, quédese aquí! Tenemos una enferma que ya ha recibido los santos Sacramentos. María pide ver a la moribunda, le pone las manos en la cabeza mientras le dice con fe profunda:
EL PODER DEL PADRE, LA SABIDURÍA DEL HIJO Y EL AMOR DEL ESPÍRITU SANTO TE LIBREN DE TODO MAL. AMEN.
Ana María se vuelve a la dueña de la casa y le dice: La gracia ya está concedida. Quédense tranquilos. Adiós.
Al cabo de poco tiempo la enferma agonizante empezaba a hablar, pedía le dieran de comer y se levantaba del lecho sana.